domingo, 19 de junio de 2016

Capitulo 8 parte 2 de 2: Confesiones del pasado

Jade: ¿Co-como que t-te i-iras?

Santiago mira a jade la cual se encontraba un poco alterada por la recién noticia que le había dado

Jade: E-es u-una bro-broma ¿ve-verdad?

Aun preguntaba jade muy incrédula por el hecho de no poder creer que su amigo se iría de la escuela para hacerse un soldado, se iría por seis años y medio que era más o menos lo que duraba en la preparación, en ese momento sintió tantas ganas de llorar pero sabía que si su mejor amigo no se sentía cómodo en esa escuela no era motivo suficiente para mantenerlo en un lugar en el cual no quería estar. Por más doloroso que para ella fuera era mejor dejarlo ir, era mejor que se fuera si ser soldado fuera su sueño.

Jade: -Esta bien, te dejaré ir- A pesar de todo la joven le regalo una sonrisa, sentía como tenía un nudo en la garganta pero no podía decir nada pues prefería que su amigo se fuera y cumplirá lo que el quería, no importa como fuera no lo detendría porque aun en ese momento él nunca la había detenido a ella y siempre había tenido su apoyo.

Santiago: "Me decía llamarme su mejor amigo y a pesar de todo...yo fui capaz de abandonarla...Ella siempre me apoyo y aun el día de su cumpleaños me fui y la deje sola, si tan solo me hubiera comportado más maduramente y no la hubiera dejado por un estúpido noviazgo..."

(Eso era lo que pensaba Santiango mientras escuchaba a su mejor amiga hablar con su sobrino y un nuevo conocido, el nunca se había dado cuenta cuanto dolor podía cargar una persona, cuanto sufrimiento podría llegar a tener, ni siquiera se había molestado en levantarse y cerrar la puerta de entrada, simplemente la habían dejado abierta)

Eugenio: ¿Cómo es que dejaste la casa el día de tu cumpleaños?

Jade: No la deje así de fácil ese mismo día, solamente tomé la decisión de dejarla y el día que me fui...fue un domingo por la mañana, cuando me fui con tu abuelo a visitar la casa de su familia le pedí permiso para irme con él y bueno el me acepto y ese mismo día me lleve mis maletas.

Eugenio: ¿Qué paso con mi abuela? ¿Qué paso con mi mamá? ¿Por qué me abandonaste?

Jade: Nunca te abandone Eugenio...Solamente que mi prioridad era yo...Si mi mamá no tiene la economía para mantenerme, no me esperare a continuar estorbando y mejor me voy con mi padre que es capaz de darme sustento y así llegar a terminar la universidad. Veraz hubo muchas ocasiones en que mi madre me decía "Pídele dinero a tu papá, pues se que el tiene dinero" y yo estaba segura que así era, que mi padre tenía mucho dinero pero ¿en serio creía que el se sacaba el dinero por arte de magia? ¡No Eugenio! si tu abuelo tenía dinero era porque le costaba ganarse ese dinero, pero aun así trabajaba y siempre se esforzó, puedo creer que mi papá tiene dinero, pero no es así de fácil para el sacar mucho dinero sin antes ganárselo con el propio sudor de su frente.

Cuando Jade hablaba de su mamá o de su papá lo hacia por separado, nunca odio a ninguno de los dos pero nunca le encanto el tema del dinero porque siempre era difícil mencionarlo sin que antes uno o el otro discutieran por ver quien le daría dinero, cuando iba a al escuela tenían un acuerdo una semana uno y otra semana otro, de todos modos era doloroso ver como el dinero podía sacar el egoísmo de cada ser vivo, podía ser que de joven sus pensamientos y creencias estuvieran mal pero para ella eso estaba bien y era lo correcto porque a veces a ella misma nunca le gustaba ser humana y mucho menos si tenía que ser igual y tener los mismo sentimientos.

Jade: Nadie en esta vida será tan bueno o tan malo pero si es posible prefería quedarme a medias y no llenarme de todo al mismo tiempo.

Leonardo: ¿Eso era una polémica para ti?

Jade: Por supuesto, tener que esperarme a ver quien me daría dinero, a veces prefería tener mi propio trabajo y mejor no pedirles nada. Es por eso que preferí salirme de mi casa e irme con mi papá y no es que quisiera abandonarlos porque en verdad nunca fue una traición o un abandono solamente era algo que podía llegar a beneficiarme. Claro que después de los 19 años ese cumpleaños fue la ultima fiesta que tuve ya que mi papá trabajaba hasta tarde y nunca estaba ese día conmigo, pero en verdad a mi no me importaba, para mí era mejor.

Eugenio: Tía...Acaso el día que cumpliste 19 años...Fue igual que...¿Tus otros cumpleaños?

Jade: Así es...No solo me hicieron ver lo solitaria que era y lo vacío que era mi corazón sino que también esa dichosa "fiesta" no era una fiesta de cumpleaños sino una fiesta cualquiera, en ese momento me di cuenta que nada había cambiado que todo era lo mismo...Y que jamás podría tener amigos...entonces pensé ¿De que servirían las personas sino eran mas que para utilizarlas y para beneficio propio?


Jade: Así fue como opte por mi cambio mas drástico...deje mi cabello crecer, deje de sentir pena por mi misma, fue así como empecé a disfrutar más y a preocuparme menos..así fue como me di cuenta que todo era más sencillo, cuando me preocupe más por mi conciencia que por mi propia reputación.

Leonardo: ¿Por qué? ¿Por qué hiciste eso?

Jade: Porque mi conciencia era lo que yo soy y mi reputación es lo que otros piensan que soy.

Leonardo: Es por eso que cuando recién nos conocíamos nunca me callaste en cuanto te dije que gastarías dinero de tu papá y que nunca trabajarías.

Jade: Así es.

Leonardo mira atónito a jade, su rostro se veía perplejo ante tales cosas que decía y contaba, hasta el mismo se podía dar cuenta como el rostro de jade se veía reflejada tanta tristeza y dolor, a pesar de que ella misma sonriera sabía que por dentro estaba hecha trizas.

Leonardo: "En ese momento no podía más...Mis ganas de abrazarla eran inmensas, deseaba tanto estrecharla en mis brazos y sujetarla lo más fuerte posible para que sintiera un poco de calor humano. ¿Cuánto es lo que puede soportar una persona que se sentía abandonada por su propia familia? no sabía como responder y tampoco sabía como actuar...lo único que quería era sujetarla y no dejarla ir, me dolía tanto ver ese rostro que sonreía pero que reflejaba tanta tristeza, en algún momento me pregunte ¿Por qué? ¿Por qué sonríe si lo que siente es dolor? ¿Por qué sonrió cuando lo que quiere es llorar? A veces me llegué a preguntar también si en el paso del tiempo ella hubiera llorado por las noches a solas sin que nadie la pudiera ayudar. Cuantas veces se calló para no ser una carga para nadie, cuantas veces se calló por la desconfianza que demostró."

Jade: Yo sola busqué ayuda con alguien más, después del intento de suicidio.

En cuanto termino de decir eso todos se quedaron sorprendidos y sobre todo Santiago que se arrastro hasta abajo mientras se recargaba en la pared.

Santiago: "¿Suicidio? ¡Dios! ¿por qué? ¿por qué la abandone? Es acaso que no pude quedarme a su lado... Pude perder a mi mejor amiga, pude perder a la única persona que me apoyo.

Santiago lloraba en silencio detrás de la pared mientras continuaba escuchando la platica, mientras tanto Leonardo atónito por la situación no puedo esbozar alguna palabra y sobre todo Eugenio agacho la mirada, parecía que lloraría pero se resistió.

Jade: Siempre me prometí que te protegería, que no permitiría que nada de lo que a mi me paso te pasaría a ti pero... no pude cumplirlo porque al final de todo tus padres se separaron y sobre todo yo me fui y te deje. Eso fue lo más difícil, dejar a mi precioso sobrino y no verlo crecer, no puedo creer que me recordaras por las canciones en japonés que te cantaba.

Leonardo: ¿japonés? ¿Ha que edad aprendiste ha hablar japonés?

Jade: Pues en realidad no lo aprendí solamente veía anime y así aprendí algunas palabra y frases. Y recuerdo bien que cuando Eugenio era un niño se quedaba dormido en cuanto le cantaba algo.

Eugenio se lanzo ha abrazar a su tía quien con una sonrisa lo sostuvo en sus brazos y lo sujeto con dulzura y cariño mientras este lloraba en sus ropas, Eugenio no dejaba que lo vieran llorar por lo que se cubría la cara en la ropa de Jade, pero jade sentía como su ropa se mojaba por las lagrimas del niño, ella acariciaba su cabeza mientras dejaba que el niño se desahogara.

Leonardo mientras observaba esa tierna escena no pudo evitar pensar: "Juzgar a una persona no define quien es ella. Sino que define Quien eres tu"

















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